Fumar es una adicción y como toda adicción no es fácil superarla, muchos fumadores quisieran dejar de fumar pero no saben cómo hacerlo. Al igual que con otras adicciones el primer paso es reconocer los problemas que fumar ocasiona, tanto al fumador como a las personas que lo rodean. El gasto económico y sobre todo el daño a la salud.

La esperanza de vida de un fumador :

• Aumenta 9 años si deja de fumar antes de los 40 años
• Aumenta 6 años si deja de fumar antes de los 50 años
• Aumenta 3 años si deja de fumar antes de los 60 años

Una vez tomada la decisión de dejar de fumar hay que revalidarla todos los días y muchas veces varias veces al día. Dejar de fumar lleva tiempo pero es posible. Cada año el número de personas que han abandonado el hábito de fumar es mayor.

A continuación te ofrecemos los 14 trucos más usados por quienes han logrado dejar de fumar.

1.- Sorbe agua fría y comer poco varias veces al día

Sorber agua fría con una pajita ayuda a reemplazar el acto de dar una calada al cigarro a la vez que libera dopamina que ayuda a superar los malos momentos.

Picar un poco de comida puede ayudar a pasar el deseo momentáneo de fumar. Come comida sana para evitar coger peso. Comer varias veces mantiene el nivel de azúcar y la energía además ayuda a prevenir el deseo de fumar. No comas dulces o comidas con mucho condimento que pueden provocar ganas de fumar.

2.- Haz una lista de los beneficios

No esperes para disfrutar de los beneficios de dejar de fumar. Haz una lista de las mejoras que notas por no fumar como por ejemplo: ahorrar dinero, oler mejor tú y tu entorno, recuperar el olfato, saborear más la comida, ser capaz de subir escaleras sin asfixiarte, no sufrir ansiedad por no poder fumar en lugares públicos, no morir de frío en invierno a la puerta del restaurante. Cuando tengas de furmar recuerda esta lista.

3.- Lávate los dientes con frecuencia

Una de las mejoras de no fumar es que el aliento huele mejor. Cepíllate con frecuencia, de esta manera reducirás las ganas de encender un cigarro y disfruta del sabor refrescante que queda en tu boca tras lavarte los dientes.

4.- No bebas alcohol

Beber alcohol es una de las principales causas por las que la gente vuelve a fumar debido a que el alcohol reduce el autocontrol, de esta manera puede erosionar tu voluntad de no fumar. Además, para mucha gente el alcohol y el tabaco están asociados el uno al otro de manera que beber alcohol es un detonante para fumar. Bebe zumos naturales, agua y bebidas isotónicas. Procura que sean bajas en calorías para no engordar, al menos durante algunos meses.

5.- Encuentra tus espacios de no fumador

Cuando tengas ganas de fumar ve a un lugar donde no se pueda fumar, como puede ser el cine, una biblioteca, una tienda, centro comercial, museos, restaurantes, si eres creyente ve a la iglesia… Si el lugar te distrae te será más fácil olvidarte del tabaco.

6.- Recuerda tus razones para dejarlo

Haz una lista con tus motivos para dejar de fumar. Haz copias y ponlas por todas partes: la cocina, la oficina, el espejo del aseo… en lugares donde se vean fácilmente. Algunos ex fumadores dicen que les ayudó poner fotos de seres queridos junto a la lista de los motivos.

7.- Mantente activo todo el día

El ejercicio es una magnífica distracción. Cuando el cuerpo está activo produce sustancias químicas naturales que mejoran el estado de ánimo y reducen el estrés. Caminar es el ejercicio más fácil para la mayoría de las personas. Hacer diferentes actividades te pueden ayudar a mantenerte motivado, al mismo tiempo notarás que hacer ejercicio te cuesta menos. Busca tiempo para mantenerte activo todos los días, especialmente el primer mes después de haber dejado de fumar.

8.- Mantente ocupado

Durante las primeras semanas tras haber dejado de fumar llena el día con cosas que quieras o tengas que hacer. Haz planes y mantente alejado de la tentación de fumar. Mientras más distraído estés menos deseos de fumar tendrás.

9.- Ten algo a mano para llevarte a la boca o tener en la mano

Parte del deseo de fumar es tener algo en la boca. Sustituye el cigarro por un chicle o caramelo sin azúcar, un snack saludable como por ejemplo zanahoria cruda, apio, manzana… Para evitar engordar asegúrate que son alimentos bajos en calorías.

Si no sabes qué hacer con las manos porque echas de menos tener un cigarro entre los dedos coge un lápiz, un clip, moneda, canica…

10.- Ten una línea de vida

Pídele a alguien que te eche una mano. Lo ideal es algún amigo que sea exfumador. Igualmente puedes pedírselo a una persona a la que le importes y quiera que dejes de fumar, su apoyo puede ser importante en los momentos difíciles.

11.- Bebe poca cafeína

La cafeína ayuda a muchas personas a mantenerse despiertas, especialmente por las mañanas, pero a otras les hace sentir tensas, nerviosas y estresadas, dejar la nicotina puede disparar estos efectos negativos. Si la cafeína te hace sentir ansioso déjala durante un tiempo.

Si tienes asociado el café a fumar un cigarro, especialmente en el café del desayuno y en el de después de comer, durante un tiempo no tomes café y nada más beberlo lávate los dientes y realiza alguna activa o sal a dar un paseo.

12.- Estate alerta a los sentimientos negativos

Las emociones negativas – estrés, rabia, frustración, depresión – son las causantes de que muchas personas recaigan. Malos momentos los tiene todo el mundo pero durante las primeras semanas tendrás más de los que te gustaría tener. Encuentra formas de distraerte, sal con los amigos o haz cosas que te diviertan. Aprende a lidiar con ellos los sentimientos negativos sin fumar.

13.- Evita conflictos y tentaciones

La familia y amigos igual que pueden ser un apoyo pueden no serlo. Algunas personas pueden sentirse amenazadas por tu decisión de dejar de fumar, pueden incluso tratar de minar tu voluntad. Si sientes que hay personas de este tipo en tu vida, evítalas, si no es posible, habla con ellas y cuéntales como de importante es para ti dejar de fumar. Pídeles que te apoyen.

Evita la tentación alejándote de personas, sitios y situaciones que te provoquen ganas de fumar.

14.- Se paciente y persiste

Una vez que has superado las dos primeras semanas sin fumar estás en el camino de conseguir una vida libre de la adicción a la nicotina. Recuerda, una recaída no significa que hayas fallado. Evalúa que fue lo que no funcionó y piensa en formas de evitar que el mismo error suceda.

Nunca te creas el pensamiento de que “una calada no me hará recaer “ porque sí lo hará.

El Programa para dejar de consumir tabaco de la AECC contiene información que te puede ser de gran utilidad.